Hoy he decidido cambiar, ser algo más que el remedo de hombre que he sido! Hoy quiero ser eso que dejamos de ser hace mucho tiempo, hoy quiero volver a ser un caballero.
No me importa si el mundo nos reconoce o no, si todo va encaminado en hacer de nosotros solo una leyenda urbana dándole paso a un extraño ser sin educación ni cultura que cree firmemente en la igualdad del sexo.
No estoy diciendo que el hombre este por encima de la mujer ni viceversa, estoy diciendo que el hombre y la mujer no son iguales, cada uno tiene sus propios intereses y sus propias cualidades. Su anatomía, su romanticismo, sus pensamientos y sus sueños son diferentes. Nosotros reconocemos y celebramos estas diferencias, ya que son estas diferencias las que nos permiten ser caballeros y damas a su vez.
La mujer es el complemento perfecto para nosotros, así como nosotros somos el complemento perfecto para ellas. Somos diferentes porque así es como ensamblamos para formar una gran mancuerna en donde fuerza e inteligencia se funden para ser uno.
Yo se lo difícil que es para todos ser algo que no conocemos ni en las películas, entonces me he dedicado a recopilar algunas reglas elementales para ser un caballero.
- Un caballero respeta profundamente la vida y los valores morales por sobre todas las cosas.
- Un caballero reconoce que los negocios tienen ética, siempre se conduce de esta forma.
- Un caballero recuerda las fechas, los lugares, es siempre puntual.
- Un caballero nunca pone excusas ni pretextos, siempre ofrece una solución.
- Un caballero come saludable y en cantidades apropiadas, cuida su salud.
- Un caballero va bien vestido, perfumado, y nunca llega con las manos vacías.
- Un caballero escucha y es paciente, no le interesa ganar una discusión.
- Un caballero nunca anda sin camisa o playera frente a una dama, excepto en balnearios y playas.
- Un caballero siempre le abre la puerta a una señora, le cede el asiento, el paso, la ayuda a quitarse el abrigo o a cargar cosas. El hecho de que lo hagan no implica que las mujeres sean inferiores, sino que son más elegantes.
- Un caballero siempre habla bien de la mujer con la que tuvo su última relación amorosa y nunca menciona algún otro encuentro amoroso que haya tenido.
- Tenga en cuenta el dicho: “A una mujer no se le pregunta a donde va, de donde viene ni la edad que tiene”.
- Un caballero no dice groserías en presencia de menores, de mujeres o de personas mayores.
- Un caballero no monta un escándalo cuando le rechazan la tarjeta, ofrece otro método de pago o trata de solucionar el problema de forma razonada.
- Un caballero siempre apaga su teléfono móvil al entrar a una conferencia, clase, reunión o ceremonia.
- Un caballero no aparca en medio de la raya que marca cada plaza de parking, en espacios reservados para minusválidos u otros usos especiales, y abre la puerta con cuidado para no golpear el coche de al lado.
- Un caballero siempre paga sus deudas o apuestas de juego.
- Un caballero siempre utiliza las palabras comodín en toda relación social: “por favor “y “gracias”.
- Cuando llega tarde a una ceremonia o al teatro espera el momento oportuno para entrar y trata de molestar lo menos posible a quienes se encuentran ya sentados.
- Si no sabe idiomas no trata de aparentar que domina una lengua.
- Un caballero siempre piensa antes de hablar y nunca interrumpe a los demás.
- Cuando alguien le ataca verbalmente, le contesta con elegancia, inteligencia y sin agresividad.
- Un caballero sabe decir frases como: “No sé, no he leído ese libro”, “no conozco ese autor” o “no he visto esa película”.
- Un caballero no se queja de su situación financiera ni habla del precio de las cosas. Lo que ha costado su traje, lo que ha costado el vino que sirve, etc.
- Un caballero acepta una disculpa y sabe ofrecerla cuando es necesario.
- En presencia de personas que hablan otro idioma, un caballero no habla mal o se burla de ellos.
- Un caballero habla en voz baja y con prudencia en lugares públicos.
- Un caballero presenta a dos personas mediante cumplidos.
- Un caballero se queja de la manera correcta.
- Un caballero nunca se alegra de los errores ajenos, porque supone que la persona que ha errado lo último que necesita es su burla.
- Un caballero siempre abre la puerta para que una dama pase, entre o salga a un vehículo.
- Un caballero siempre sabe mantener el control cuando bebe alcohol, sabe ser prudente. Sabe que bajo ninguna circunstancia se puede pasar de copas frente a mujeres y/o niños.
- Un caballero siempre se levanta al entrar o salir una dama de una habitación al igual que cuando una dama deja o llega a la mesa.
- Un caballero nunca es meloso con su pareja en público, siempre la trata con respeto y dignidad.
- Un caballero siempre ayuda en la educación y crianza de los hijos algunas veces como ejemplo, otras como educador.
- Un caballero siempre mantiene en orden el lugar donde vive o trabaja, si no cuenta con personal para la limpieza debe ayudar en las tareas domesticas.
- Las reglas sobre mujeres aplican solo cuando ellas no están trabajando, es decir, no te levantas cuando una camarera entra a tomar tu orden.
- Cuando presentas a alguien debes comenzar siempre por las damas de mayor edad, luego los caballeros de mayor edad.
- Un caballero jamás adula o sobre agradece, ni espera las gracias ni los cumplidos. Después de todo, eso es lo que se debe hacer no?
- Un caballero jamás corre, a menos de que sea un caso de vida o muerte.
- Un caballero siempre se sienta correctamente en su trabajo, en su casa o en lugares públicos donde haya damas y/o niños.
- Un caballero siempre habla con la verdad, cuando no la conoce, mejor calla.
- Un caballero calla antes de hablar mal de alguien, la lengua es un arma muy poderosa y generalmente la causante de problemas.
- Un caballero siempre sabe el valor del tiempo, por eso, procura no perderlo ni desperdiciar el tiempo de los demás.
- Un caballero jamás entra en discusiones teológicas ni políticas, conoce sus propios convicciones y respeta las convicciones de los demás, así mismo exige se respete sus convicciones.
- El caballero no juga la sexualidad de los demás, por el contrario la entiende como un gusto personal de cada quien. Pero tampoco permite ni acepta el exhibicionismo desmedido por parte de nadie.
- Un caballero jamás exagera sus sentimientos, ni revienta en llano ni rie a carcajadas efusivamente.
- Un caballero tiene palabra, honor y siempre cumple sus promesas.
- Un caballero nunca hace sentir mal a una mujer, incluso cuando ella está equivocada. Siempre encuentra una salida a su dilema con clase y humildad.
El hombre ha dejado de ser caballero, ya no es más que un guiñapo de la moda, resultado de horas y horas de programas televisivos y mala información. Necesitamos trabajar en pro de nuestra educación y sobre todo educar a los más jóvenes en este noble arte de la caballerosidad.
La mayoría de nosotros sabemos estas reglas, solo que nunca las ponemos en práctica, es más fácil, menos trabajo… Sin embargo cuando un caballero está en la habitación la demás gente lo nota, es evidente, porque la educación brilla, sobre todo ahorita que vivimos en la obscuridad.
El hombre necesita salir de la ignorancia y esta falsa moda que confunde el ser un hombre fino y limpio por el hombre femenino y estético que pierde su forma en las imágenes casi femeninas de sus peinados, estilos y formas.
El caballero no se pierde en la apariencia, ni es su forma de vestir, se ve en su forma de comportarse, en su forma de ser, en la manera con la que interactúa con otros hombres y sobre todo con las mujeres.
El día que los caballeros regresemos a este mundo y tomemos nuestro lugar como sustento, como protector y guía de la familia, entonces las mujeres no tendrán la necesidad de hacer el trabajo que nosotros dejamos de hacer hace mucho tiempo.
Vamos a celebrar que los caballeros están de regreso, que los caballeros siguen presentes mostrándole al mundo que todavía existe el honor, el respeto y la prudencia, todo esto siempre con sentido del humor!
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